EL QUIOSCO
Víctor Morales

“Luis Beltrán, el padre de los padres”



Quienes en su momento fueron los principales detractores del Sacerdote Luis Beltrán Mijangos Molina, hoy han expirado. Quienes propalaban que el Presbítero “antizapatista” tenía contados sus días de vida, hoy ya se encuentran bajo tierra. Quienes fueron los responsables  de aquellos atentados a mano armada orquestados en contra del Religioso, a mediados de los años 90, hoy han pasado a mejor vida y sin embargo, Mijangos Molina aún continúa de pie.
Ya falleció Samuel Ruiz García y recientemente le tocó el turno a Eugenio Álvarez Figuera, y Luis Beltrán,  aunque con problemas de salud pero sigue gozando del privilegio de estar vivo, siempre fiel a su vocación sacerdotal y firme en sus ideales lo que le ha permitido estar vigente en la memoria de muchos católicos.
El más grande y grave error cometido por el Clérigo Mijangos Molina, fue el haberse declarado a favor de la vida y en contra de la guerrilla zapatista de 1994 en la cual, varios niños, mujeres y ancianos perdieron la vida en el fuego cruzado. Han transcurrido 19 años de ese derramamiento de sangre y el Sacerdote sigue padeciendo las consecuencias de no haber comulgado con los ideales insurrectos de Samuel Ruiz García, otrora impulsor del EZLN.
Existen Sacerdotes y miembros del clero que han incurrido en faltas superiormente graves, y que aunque ameritan la aplicación de todo el peso de la ley eclesiástica,es todo lo contrario, pues son consentidos por las autoridades católicas.  
Casos vergonzosos, como el que por años a protagonizado el Sacerdote  Jorge Díaz Olivares, ponen en entre dicho el prestigio de la tan ya carcomida imagen de la iglesia, Díaz Olivares, es acusado fuertemente por la sociedad de mantener una relación amorosay de haber procreado hijos bajo el consentimiento del Obispo Felipe Arizmendi Esquivel.
Todo indica que el principal pecador resulta ser Luis Beltrán, y no sacerdotes de la calaña de Díaz Olivares, mismo que no ha sido castigado por violar el celibato eclesial.
Otro caso es el de Ricardo Urbina, mejor conocido en el bajo mundo como “El Tamaro”, quien cuando se desempeñó como Maestro de Educación Física en la Escuela Secundaria del Estado de esta ciudad, fue señalado como acosador de alumnas, y a pesar de que sus perversidades en contra de las menores estudiantes fueron documentadas en periódicos estatales y locales, este permanece como Sacristán de la Catedral de San Cristóbal de las Casas, incluso hay quienes afirman que “El Tamaro” es íntimo del Jerarca de la Iglesia Católica,  a niveles de lavandero de la ropa interior de Arizmendi Esquivel.
En vez de limpiar la tan enlodada imagen de la Diócesis, el propio Obispo a convertido a la misma, en una Diócesis en estado de putrefacción, al tolerar sin el menor rubor la presencia de sacerdotes con mujer y también de acosadores sexuales. En pocas palabras, La Iglesia está más desacreditada que una “mujer de la vida alegre”, lo que ha generado que sectas religiosas distintas a la católica tomen más fuerza entre el pueblo creyente.
Luis Beltrán Mijangos Molina, nunca ha sido excomulgado como lo maneja públicamente y a su conveniencia el Obispo y los Sacerdotes actuales, aunque estos mismos han tratado de mancillar la reputación del Clérigo, y le han cuartado de manera por demás ilegal el derecho de oficiar misas en los templos de la ciudad, Mijangos Molina, goza del cariño y afecto de gran parte de la feligresía católica. Todos le recuerdan y reconocen su valentía para denunciar y enfrentarse públicamente a Samuel Ruiz García  y aunque hoy está un poco desgastado de salud,  Luis Beltrán Mijangos Molina, es y seguirá siendo el padre de todos los padres de la sotana.

NOTAS CORTAS
SUS LIGAS con Marcial Maciel son suficientes para que el Cardenal Primado de México Norberto Rivera Carrera tenga remotas posibilidades de convertirse en algún momento Jerarca mundial de la Iglesia católica, Rivera Carrera carga sobre sus hombros la pesada lapida de encubrir a Sacerdotes que se han visto envueltos en escandalosos casos de abuso y acoso sexual cometidos en agravio de menores de edad. La renuncia de Benedicto XVI no es eclesiástica, ni de salud, ni de edad, es de Estado, absolutamente política y, como ha dicho por el bien de la Iglesia haciéndose a un lado, para que el proyecto fluya, pero aunque no intervino en el proceso de sucesión, él ya había dejado lista toda la operatividad para que elegir a su sucesor y de esta manera  continuar influyendo en las decisiones del Clero. El Pontificado de Benedicto ya concluyó pero deja pendiente la omisión de no haber castigado las perversidades de Maciel***** EL DERECHO a manifestarse públicamente está consagrado en nuestra Carta Magna siempre y cuando no se trasgreda el derecho de terceros. El plantón de “supuestos” maestros en días pasados reveló su falta de cultura y educación.  Ya de por si la zona del mercado “Díaz Ordaz” de la capital chiapaneca desata olores nauseabundos; la presencia de los maestros, agravó en días pasados  la situación con olores a meados, estiércol y demás. Cuando han tenido comportamientos adecuados, han gozado del respaldo ciudadano; pero cuando rebasan los límites del respeto al ciudadano común molestan y obligan a la crítica. Ojalá que cuando a estos incultos “maestritos” se les ocurra planear otra más de sus vagancias mejoren su conducta pues se supone son el ejemplo de virtudes***** Envíeme sus denuncias y comentario al correo electrónico ahuizote_@hotmail.com... NOS VEMOS 

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